¡Bienvenido verano! La época del año en la cual nos gusta disfrutar más al aire libre, llevar ropa más suelta y juntarnos con amigos. Sin embargo, no todo es color rosa. Es justo durante estos tiempos que debemos tener más cuidados con nuestra piel y la hidratación del cuerpo. A continuación, te comparto algunos tips que considero cruciales para preservar nuestra piel sana y radiante.
En primera instancia, seguir una alimentación adecuada, teniendo en cuenta hidratarnos más. Hay una expresión que dice “come tu agua”, que quiere decir que aproveches el agua natural que se encuentra en frutas y verduras. Los alimentos son capaces de nutrirnos y aportar hidratación a nuestro cuerpo. Además puedes mantenerte hidratado con agua pura que podés agregarle chía (fuente de Omega 3) jugos, licuados y tés fríos. Tené en cuenta que si quieres aportar nutrientes reales a tu cuerpo aquellas que elijas deben ser locales y de temporada. Si vives en Mendoza aprovecha el melón, la sandía, las cerezas, damascos, y otras variedades. ¡Si que vivimos en una tierra abundante! Especialmente consume alimentos con carotenoides, que son compuestos antioxidantes que se encuentran en frutas y verduras de color naranja, amarillo, rojo y verde oscuro. Estos compuestos tienen propiedades beneficiosas para la piel, ya que ayudan a protegerla de los daños causados por los radicales libres y los rayos UV. Además, se ha demostrado que los carotenoides pueden ayudar a mejorar la hidratación y la elasticidad de la piel, así como a reducir la inflamación. Algunos alimentos ricos en carotenoides son: zanahorias, pimientos rojos, batatas, calabazas, espinacas, brócoli, remolacha, cerezas y damascos.
Es muy importante que te cuides del sol. Evita la exposición solar durante las horas centrales del día (de 12 a 16h), los rayos nocivos del sol inciden con mayor fuerza en nuestra piel. Es por esta razón, que además de recomendarte el uso de cremas solares de alto factor de protección solar (FPS), te aconsejamos, que evites en la medida de lo posible, la exposición directa al sol durante esta franja horaria. El protector solar es un must si querés evitar manchas, envejecimiento prematuro y alteraciones en la piel. El sol puede dañar el microbioma por lo que es crucial usar protector solar con alta o media protección. Durante el verano la piel está más expuesta a factores que pueden dañar o afectar el microbioma cutáneo. La elección de un factor solar puede ser algo complicado, pero ten en cuenta que es necesario para evitar quemaduras, foto envejecimiento e inflamaciones. También es importante que la limpieza que elijas sea adecuada para tu tipo de piel; además de evitar abrasivos como jabones y sobre exfoliar, ya que necesitamos más que nunca que la barrera no se afecte. Usa limpiadores suaves que contengan superalimentos para estimular la salud de tu piel.
Necesitamos días de descanso, piscina y playita; pero la piel requiere un cuidado extra en estas épocas. Cuidala y mantenela radiante todo el año.